En {Ideas de Izquierda} 13 decíamos que, bajo el impacto de las turbulencias que siguieron al default obligado por el litigio con los buitres, el gobierno aceleró un movimiento febril que va, sin solución de continuidad, hacia un rumbo y el opuesto al mismo tiempo. Las novedades más recientes no desmienten esta lógica, aunque la balanza tiende a inclinarse cada vez más a la derecha en la política oficial.